Gran parte de mi trabajo consiste en adaptar la experiencia del diseño profesional a la estrategia, la cultura y el futuro de territorios y organizaciones. Y lo hago siempre con la mirada puesta en los escenarios de un futuro ecosocial.
El diseño define tanto la aparición del objeto en el mundo como nuestra propia mirada a ese objeto. El diseño no sólo presenta la realidad, sino que nos permite ver también la brecha entre cómo es la realidad y cómo podría ser. Además de objetos y productos, podemos diseñar sistemas y modos de relacionarnos o de habitar.
En 2014 comencé a investigar y a experimentar con las posibilidades del diseño participativo en Factoría Cultural de Matadero Madrid. Desde entonces he participado en proyectos de Service Design y otras prácticas derivadas del diseño orientadas a satisfacer los deseos de mis clientes y sus usuarios más allá de los intereses centrados en el ser humano.
Mi especialización en Diseño de futuros y en Humanidades ambientales me permiten evidenciar nuestras propias relaciones de interdependencia y ecodependencia. ¿Cómo? Activando la participación de cada agente involucrado en un proyecto con una mirada crítica y un enfoque sistémico en el contexto de transición ecosocial. Solo así entiendo la verdadera innovación abierta.
Recientemente tuve ocasión de definir cómo se percibirá y cómo se comprenderá la comunicación para el departamento de Centros Escolares de Save the Children España. También colaboré el diseño de la estrategia relacional para una empresa de gestión integral de residuos con el equipo de IKIGAI. El diseño participativo fue clave para trabajar con herramientas de prospectiva, capaces de definir escenarios de futuro para FESABID, o para las comunidades energéticas en un proceso mano a mano con Greenpeace España. Cada día compruebo que el diseño permite integrar necesidades y relaciones a futuro. Necesitamos el diseño más que nunca.
Como defensor de la imaginación, la intuición y el ingenio al servicio del trabajo, considero el diseño como la gran práctica colaborativa capaz de identificar el origen de un problema y de trascender su resolución para definir entornos verdaderamente vitales y contributivos. Ese es para mí el gran objetivo de toda estrategia del diseño. Por eso sigo expandiendo mis redes y mis conocimientos entre las iniciativas más regeneradoras del ámbito social, cultural y medioambiental.
Germán Gullón © 2024. Todos los derechos reservados.